En el marco del Día Internacional de la Lengua Materna, la Unidad de Atención a las Comunidades Indígenas (UACI) continúa el apoyo a la investigación lingüística con el acceso a las comunidades hablantes del náhuatl y wixárika en Jalisco.
La Unesco proclamó el Día Internacional de la Lengua Materna en el año 2000 para promover la diversidad cultural y lingüística, y así preservar las culturas e idiomas que fomenten la tolerancia y el respeto de los demás.
El director de la UACI, José Claudio Carrillo Navarro, destacó la preservación de las lenguas más habladas en Jalisco a través del respaldo a la investigación académica.
“Desde hace mucho nosotros hemos apoyado proyectos de investigación que han estado trabajando con el idioma náhuatl y con el wixárika. Nosotros apoyamos al trabajo de los investigadores y la difusión dentro de las comunidades, y que lleguen materiales educativos”.
Mencionó que el Departamento de Estudios en Lenguas Indígenas (DELI) ha investigado durante los últimos 30 años temas lingüísticos de lenguas maternas entre los cuales destacó la gramática del wixárika.
“El proyecto del doctor José Luis Iturrioz Leza formó, como lingüistas, a un grupo de hablantes wixárikas que han elaborado una gramática de su lengua. Son avances importantes que requieren más esfuerzos institucionales”.
Otro de los frentes para la protección de las lenguas maternas, de acuerdo con Carrillo Navarro, es la posibilidad de diseñar un programa institucional para el fortalecimiento del conocimiento y la cultura de los pueblos originarios desde el nivel medio superior y superior.
“Tenemos que formar a los estudiantes y profesores; en este caso, la cultura mestiza es la que tiene más resistencias para participar en este tipo de procesos. Necesitamos desarrollar acciones que no sólo sensibilicen, sino que incluyan contenidos curriculares”.
Destacó el combate a la discriminación lingüística por la cual los hablantes de las nuevas generaciones prefieran el español a su lengua madre, o hablarla sólo con su familia por el temor a la exclusión en el mundo occidental y mestizo.
El Censo de Población y Vivienda 2020 del INEGI estima que en Jalisco hay 66 mil 963 personas hablan alguna de las 55 lenguas y variantes, que representan menos del uno por ciento de la población total del estado.
La lengua wixárika la hablan 24 mil 256 personas y representan 36.22 por ciento. Le sigue el náhuatl con 18 mil 362 hablantes o 27.42 por ciento. Luego 4 mil 759 hablantes de purépecha (7.11 por ciento), mixteco con 4 mil 48 hablantes (7.11 por ciento), zapoteco 2 mil 55 (3.07), otomí mil 624 (2.43 por ciento), tsotsil mil 444 (2.16 por ciento) huasteco mil 262 (1.88 por ciento), mazahua mil un (1.49), entre otras lenguas.
De acuerdo con Gabriela Juárez Piña, responsable del Programa de Salud Intercultural en la ZMG, de la UACI, a la fecha el 80 por ciento de los hablantes de una lengua indígena se concentra en las localidades originarias de Bolaños y Mezquitic, en el Norte del estado, y la población indígena migrante asentada en municipios de la Zona Metropolitana como Guadalajara, El Salto, San Pedro Tlaquepaque, Tala, Tlajomulco de Zúñiga, Tonalá y Zapopan.