El uso de Bitcoin conlleva problemáticas económicas y jurídicas debido a la ausencia del respaldo de un Banco Central, por lo cual la adopción de esta criptomoneda por parte de El Salvador luce más como una medida desesperada y un probable experimento fallido, consideró el Coordinador del doctorado en Estudios Económicos de la UdeG, Antonio Ruiz Porras.
El catedrático además explicó que esto no quiere decir que el uso de dinero electrónico sea descartado, sino que es tiempo de discutir el tema, pues este tipo de opciones son flexibles, sin embargo hace falta mucha regulación para evitar que las personas pierdan su poder adquisitivo ante los vaivenes de esas nuevas monedas electrónicas.
“Sí hay problemas, porque es un activo digital que en estricto sentido no cumple funciones tradicionales de una moneda, no es un medio aceptado de manera generalizada como medio de pago y tampoco es reserva de valor, pues sube y baja de manera abrupta, y si no es una reserva de valor y no es medio de pago ni unidad de medida, es difícil fraccionarlo, por ejemplo”.
Explicó que las monedas tradicionales tienen respaldo en un banco central, por lo que si por alguna razón hay una eventualidad, está protegido el ahorro de la moneda, ya que los bancos centrales cumplen esta función de seguro de depósito para proteger el poder adquisitivo de las personas a través de su dinero.
“El bitcoin no tiene banco central y nadie se hace responsable en caso de pérdidas. Por esa razón es muy riesgoso el uso de bitcoin, porque no hay responsables en caso que algo salga mal, no cumple funciones de una moneda e incluso países como El Salvador que dijeron que lo aceptarían, ya lo están dudando por las implicaciones que tiene. No es el primer caso de un país que acepte el Bitcoin, China, aceptó y luego dudaron”.
A inicios de junio, El Salvador se convirtió en la primera nación del mundo en adoptar el bitcoin como moneda de curso legal. El presidente Nayib Bukele anunció que la medida entra en vigor en septiembre y hasta presumió que se trata de un plan financiero “a prueba de balas”
Para Ruiz Porras esta es una medida hasta cierto punto desesperada. Recordó que los únicos países en Latinoamérica que han aceptado monedas electrónicas han sido Venezuela, con el Petro y ahora El Salvador con el Bitcoin. En la nación sudamericana –consideró- el experimento nació muerto y por eso naufragó.
¿El hecho que El Salvador adopte esta criptomoneda puede desembocar en una ola de más naciones aprobándolas?
Pienso que es poco probable.
El dinero electrónico todavía necesita evolucionar para que pueda cumplir con las funciones de la moneda y ofrezca ciertas seguridades a la gente que lo usa.
Y aunque han aparecido nuevos productos como tarjetas de debito digitales más flexibles, el especialista considera que además se necesitan opciones de mayor dinamismo, pero sobre todo una mayor regulación, pues ese es el gran problema de las monedas electrónicas, que nadie se hace cargo de las pérdidas cuando se colapsa el precio.
Más bien hay «dolarización»
Ruiz Porras también se refirió a la dolarización de la economía en algunos rincones del planeta. Y es que el dólar estadounidense se ha abaratado.
“En los últimos años, por consecuencia del COVID-19 y políticas de Trump. se devaluó y muchas monedas comenzaron a reevaluarse, incluyendo el peso mexicano, por esa razón hemos tenido tipo de cambio relativamente estable. Curiosamente no es acierto de política mexicana, sino consistente debilidad del dólar; esto significa que llevamos un par de meses, por no decir un poco mas de un año, en que el dólar ha sido barato y esto ha implicado oportunidad de adquirirlo y por la tradición de que la gente guarda dólares para preservar su valor, lo que ocurre ahora es que en aquellos lugares donde hay mayor incertidumbre la gente prefiere transacciones en dólares que en monedas locales.
¿Hay países que hayan desplazado a su moneda para adoptar el dólar estadounidense?
Se da en muchas economías emergentes. Dos casos paradigmáticos: Ecuador desapareció su moneda, el sucre, y la sustituyó por el dólar y estabilizó su economía, y ganar así credibilidad política. Otro ejemplo es Belice, con el dólar beliceño atado al valor del dólar estadounidense, con una relación a dos uno. Cuando un país renuncia a su moneda local, también reduce a su política monetaria.
¿México aún así tiene muchas regiones dolarizadas?
Así es, en muchas zonas turísticas la moneda de cambio normal es el dólar o en cuanto a propiedades el centro occidente del país, sobre todo en las fronteras.