La rebeldía se puede expresar en miles de formas, pero la literatura es una de las favoritas de Mariño González.
El escritor tapatío y entrañable personaje de la Feria Internacional del Libro de Guadalajara (FIL), a quien siempre se le ve de un lado para otro como gestor de la prensa en cada edición, presentará en esta edición un libro que atesora: Vietnam.
El texto reúne los primeros cuentos que Mariño González comenzó a escribir a mediados del 2000, y que fue editado en 2005.
Ahora, con motivo de los 15 años de su publicación (con un añito de desfase debido a la pandemia), Ediciones Arlequín presentará una reedición durante la FIL 2021.
El escritor tapatío nos platica sobre lo que representa darle un nuevo aire a este libro que le ha significado mucho y cuya presentación será el viernes 3 de diciembre, a las 20:00 horas, en el Salón F del Área Internacional de Expo Guadalajara.
Durante la FIL se podrá comprar la nueva edición de Vietnam, así como en la página de Ediciones Arlequín.
¿Qué vamos a encontrar en este nuevo Vietnam?
Incluye un prólogo de Antonio Ortuño, quien fue uno de los impulsores del libro cuando lo escribí, hace 16 años; pero también un preludio a manera de historieta, hecha por el periodista y músico Ezequiel Cruz. Él desarrolló una historia de 14 páginas en cómic, en lasque recupera a los personajes que aparecen en los cuentos y me retoma a mí como personaje convertido en perro, lo cuál es uno de mis mayores sueños: convertirme en dibujo animado. Es una interpretación muy bonita que me entusiasma, pues siempre tuve el delirio de ser dibujante, pues nunca lo hice de forma profesional.
De hecho, empecé a escribir relatos por mi imposibilidad de hacer dibujos. Todas las ideas que tenía las intentaba y no me salía muy bien, entonces empecé a dibujar con palabras y así se fue dando el estilo de los textos.
Mariño González, ilustrado por Ezequiel Cruz, es uno de los protagonistas del cómic que se encuentra en la nueva edición.
¿Cómo nació el libro?
En 2005, yo me desempeñaba como reportero en la fuente cultural en varios periódicos de Guadalajara. Y entonces escribí historias humorísticas y fantásticas, entrelazadas con mis experiencias como reportero en aquellos días, pero también por las lecturas que devoraba fervientemente en ese entonces, que eran las novelas de Boris Vian, uno de mis autores de cabecera favorito. Son historias humorísticas que tienden al absurdo y que tienen que ver desde situaciones cotidianas hasta otras más complejas, incluso con seres ultra terrenales.
¿Cómo sientes que ha envejecido la obra?
He conocido a colegas que se avergüenzan de sus primeros libros, pero no es mi caso, pues Vietnam me tuvo muy contento cuando salió y me tiene muy contento ahora. Ese libro que yo quería escribir en mis veintitantos años; es una suerte de autobiografía literaria de quien era yo en ese momento. Me parece fascinante cómo este libro va encontrándose con los lectores y ha permanecido y permea en el público juvenil. No hay cosa que le haya querido cambiar a estos cuentos. En la nueva edición sí hubo ligeras correcciones, erratas, pero no hubo gran cambio.
¿Qué consideras que es lo mejor que te ha dejado este tu primer libro de cuentos?
Una de las mayores satisfacciones es que Vietnam me permite conectar con nuevos y viejos lectores. Parece mentira, pero este libro me abrió un montón de puertas y me llevó a conocer gente muy interesante y hacer colaboraciones en otros ámbitos artísticos, como la música. Afortunadamente este libro ha sido muy leído y espero que siga buscando sus lectores.
¿Qué otros proyectos tienes en puerta?
Hay varias cosas: se reimprimirá Pésimas personas, que es mi segundo libro de cuentos, también por Arlequín y se podrá encontrar en la FIL. Esta es una especie de continuación de Vietnam. También mi primera novela Futbol: Una novela punk, que se publicó en 2010 por el Fondo Editorial Tierra Adentro, tendrá una nueva edición; de igual manera por Ediciones Arlequín. A la par sigo escribiendo y no dejo de hacerlo, aunque aún no tengo intención de publicar por el momento.
También estoy enfocado en la parte musical, pues escribo canciones para cantarlas. Estoy en la agrupación Los Magones, donde toco con Antonio Ortuño, Álvaro Moreno y Óscar Frías. Pero también tengo el proyecto La Otra Banda Canceló, con Jorge Alberto Pérez, Ezquiel Cruz y Josué Nando, un proyecto que nació a partir de un libro de Jorge Alberto Pérez.
Para mí el motivo mágico de la creación musical es estar con mis amigos en el garage, el simple hecho de crear por crear es ya tener éxito.
Se ve nutrida tu próxima agenda… ¿De dónde parte tanto ímpetu por crear literaria y musicalmente?
Yo creo que son las ganas de hacer cosas, siempre he tenido el impulso por crear de una u otra manera y siempre he buscado varios formatos: dibujar, escribir, haciendo música. Todo esto va más allá de mi desarrollo profesional como periodista. Para mí tener éxito es poder seguir haciendo cosas que me gusta.
¿Qué te gustaría que se quedara en la mente de la gente tras leer Vietnam?
Que se diviertan tanto como yo lo hice cuando lo escribí y que encuentren en ellos un gesto de complicidad con las cosas que piensan o vivan, pero que también se lleven el carácter rebelde que se suscita a través de la escritura.
Siempre he dicho que la literatura es una de las manifestaciones de mi rebeldía.
